El Gobierno podría actualizar esta semana un impuesto que incide en el precio del litro de nafta y gasoil.
Se trata de un monto que se encuentra actualmente en $27,6 desde julio de 2021 y que, según estimaciones, una suba del 100% causaría un incremento del 25% en los surtidores.
Se trata de los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), que el anterior gobierno dejó sin actualizar durante dos años y medio, en medio de la creciente inflación, a pesar de que el decreto N° 501, de mayo de 2018, establece su renovación cada tres meses.
La última prórroga fue decidida en noviembre del año pasado por el ex ministro de Economía, Sergio Massa, y vencerá este 1° de febrero.
En caso de que la actualización de estos 30 meses se diera de forma abrupta, implicaría un salto en el precio de la nafta de $95 por litro, y $65 en el gasoil.
Actualmente, en la Ciudad de Buenos Aires, los precios de YPF rondan los siguientes números: $699 el litro de nafta súper; $862 el de nafta premium; $736 el gasoil súper, y $938 el gasoil premium.
La eventual suba se daría en el marco de una fuerte inflación en el trimestre -a pesar de una desaceleración en la suba de precios detectada por las consultoras privadas en las últimas semanas-, mientras el Gobierno negocia cómo alcanzar el déficit cero en el primer año. En ese marco, la actualización del impuesto serviría para aumentar la recaudación de las arcas públicas.
A mediados de diciembre, el ministro de Economía, Luis Caputo, explicó el motivo por el que se dio una suba del 37% en el precio de los surtidores: “Ocurrió porque una corrección del tipo de cambio se traslada prácticamente en su totalidad a las naftas. Pero va a ser un sendero. El primer mes del 37%, y después un sendero más bajo hasta probablemente marzo”.
RM