La Universidad Nacional de San Luis (UNSL) analizará los efluentes cloacales que emiten las industrias locales, gracias a un convenio firmado con Obras Sanitarias Mercedes (OSM). De esa manera, la institución educativa aportará sus conocimientos para, luego, mejorar la forma en que se desechan este tipo de residuos en la ciudad.
La Facultad de Química, Bioquímica y Farmacia (FQBF) lleva adelante un proyecto de investigación para desarrollar métodos de tratamiento de los vertidos de las fábricas. “Son procesos de oxidación avanzada que se aplican en aguas de cierta complejidad, que no se pueden tratar por mecanismos tradicionales”, explicó Bibiana Barbero, quien integra el Instituto de Investigaciones en Tecnología Química, conocido por sus siglas InTeQui.
Después de presentarse en una convocatoria del Ministerio de Ciencia de la Nación, obtendrán financiamiento para profundizar esos estudios, que pueden resultar muy beneficiosos para las diferentes poblaciones.
Por eso, ambas instituciones sellaron un acuerdo de cooperación mutua, que les permitirá a los profesionales tomar muestras de los efluentes que son derramados en la ciudad para analizarlos y obtener ciertos datos. “Hay una serie de valores técnicos, como la demanda química y biológica de oxígeno, incluso contenidos de metales y algunos otros parámetros, a los que se los considera mediciones de la contaminación del agua”, sostuvo.
Con esa información en mano, podrán comprobar si todos están dentro de los límites establecidos por la legislación vigente y, si es necesario, también podrán asesorar a las empresas para que adecuen sus procesos a los estándares requeridos, sobre todo cuando se pongan en marcha la nueva planta de tratamiento y el colector industrial.
DLR