Las elecciones en la Argentina quedaron ya consagradas como ese momento donde lo inesperado se hace una costumbre. Esta vez la sorpresa la dio Sergio Massa, el candidato y ministro de Economía que ganó las elecciones presidenciales por casi siete puntos. Dejó atrás al libertario y favorito Javier Milei, mientras que la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, quedó relegada 13 puntos más atrás. El primero y el segundo, el 19 de noviembre, competirán en un balotaje que asoma con final abierto.
Los números fríos que anoche brindó la Dirección Nacional Electoral dejaron vivas las esperanzas tanto en Unión por la Patria como en La Libertad Avanza. Es que en los 27 días que quedan por delante hasta la segunda vuelta, tanto Massa como Milei están en condiciones de alzarse con la victoria. El éxito o fracaso quedaron en sus manos. En votos, Massa cosechó 9.600.000 (36,6%), Milei 7.864.000 (30%), Bullrich 6.246.000 (23,8%), Juan Schiaretti, de Hacemos por Nuestro País, 1.781.000 (6,8%) y Myriam Bregman 708.00 (2,7%).
Siguiendo con sumas y restas, de las PASO a las generales, hubo unos 3 millones de votos más, casi lo mismo que sumó Massa de un turno al siguiente. Lo siguieron Schiaretti, que acrecentó 870 mil, Milei que subió 770 mil, y Bregman, 80 mil. Bullrich fue la única perdió votos entre las primarias y las generales: -440 mil.
Y completo con detalles que describen el peso decisivo que tuvieron en cada provincia el aparato partidario. La maquinaria peronista funcionó este domingo a todo vapor y hubo un salto cuántico de las PASO a las generales: Massa acumuló 1,4 millones de votos más sólo en la infinita Buenos Aires y otro millón en las 10 provincias más pobladas. Para poner dos ejemplos: en Santa Fe, en las primarias el PJ tuvo 386 mil votos y ayer 600 mil (así y todo quedaron segundo); y en Tucumán de Juan Manzur, pasaron de 314 mil a 471 mil votos (en este caso sí pasaron al primer puesto).