La celebración de una boda, en Al Hamdaniya, provincia norteña de Nínive, Irak terminó en tragedia, debido a un feroz incendio que dejó como saldo 114 personas muertas y más de 200 heridos.
Según EFE, la catástrofe ocurrió el martes a la noche entre madrugada de este miércoles y fue a causa del uso de fuegos artificiales y de bengalas en el interior de la sala donde se celebraba la boda. El local estaba cubierto de paneles de plásticos Ecobond, que son altamente inflamables. Además, la sala no contaba con sistemas de alarmas ni de extintores.
Algunos testigos indicaron que el fuego se propagó rápidamente y como los materiales eran de bajo costo, se derrumbaron rápidamente sobre los invitados que estaban concentrados en la pista de baile.
Al iniciarse el incendio muchos comenzaron a correr y a amontonarse en la puerta de salida, donde muchos cayeron al piso y fueron pisoteadas por otras personas.
Una enfermera del hospital de Mosul, ciudad muy cercana a la sala de fiestas siniestrada, dijo a EFE en condición de anonimato que el centro sanitario ha recibido decenas de cadáveres que “están pegados los unos con los otros de tal manera que no se puede distinguir el cuerpo de un hombre del de una mujer. Nunca en mi vida he presenciado algo tan horrible”, relató a EFE.
