Cuando los familiares de la víctima se enteraron salieron a manifestarse en el Poder Judicial. El hecho sucedió en 2019 en Juan Jorba, y él era el padrastro.
Adrián Horacio López fue condenado a 10 años de prisión en diciembre del 2019 por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado doblemente por ser guardador, en perjuicio de la hija de su ex pareja. Este jueves por la mañana llegó al Poder Judicial de Villa Mercedes para pedir salidas transitorias.
Para ello mantuvo una entrevista con el cuerpo forense de la Segunda Circunscripción Judicial. Está a mitad de cumplir la pena. El beneficio lo tramitó en el Juzgado de Sentencia de la segunda Circunscripción Judicial, que está a cargo de Nora Villegas.
La familia de la víctima se congregó en la puerta de los Tribunales porque se oponen y piden por la integridad física de ella.
“Lo va a pedir bajo la tutela de una persona que vive a unos 500 metros de nuestra casa, en la localidad de Juan Jorba”, transmitió la madre de la chica en diálogo con El Chorrillero. El acusado fue su ex pareja.
“Siempre fue un hombre muy violento, mayormente conmigo, creemos que me pegaba a mí para no pegarle a mi madre”, dijo el hijo biológico del imputado, que participó de la protesta.
Hoy se dispuso que el 23 de mayo a las 9:30 la víctima deberá presentarse a una audiencia, antes de que se resuelva si le otorgan al abusador los permisos o no.
En enero del 2019 la madre realizó la denuncia por el abuso que había sufrido su hija cuando tenía 9 años, por parte de su ex pareja, López. “Vivíamos en la misma casa junto a nuestro hijo y mi hija”, dijo.
El juez de ese entonces, Leandro Estrada ordenó que allanen la casa y dispuso una prohibición de acercamiento. “Después de eso seguía libre como si nada, seguía trabajando con niños en el hospital de La Pedrera porque es enfermero profesional”, señaló. Aclaró que también fue director del centro de salud de Juan Jorba.
En agosto del 2019 la mujer decidió exponer el caso por primera vez en los medios de comunicación: “A partir de ahí no trabajó más con niños y quedó haciendo tareas administrativas. En diciembre le otorgan la prisión preventiva debido a que rompió la prohibición de acercamiento porque quería comunicarse conmigo”, reveló.
Al año siguiente lo condenaron.
“Hace dos días nos notificaron que iba a pedir salidas transitorias, por primera vez”, señaló la mujer.
Él está en el Servicio Penitenciario Provincial, en la ciudad de San Luis, y está realizando el curso de soldador.
El Hecho
La víctima, que ahora tiene 28, sufrió abusos por parte de su padrastro cuando tenía 9 años, y lo pudo confesar a su madre hace 6 años.
En el 2016 dejó de vivir en la casa que compartían con el abusador, porque se había ido a estudiar a Río Cuarto.
“Yo me enteré a través de una carta que me escribió mi hija”, contó, y agregó que fue luego de que la víctima hiciera terapia psicológica.
“En el 2018 cuando fallece mi mamá, mi hija tiene una crisis de angustia y ataques de pánico, entonces la atiende la psicóloga de la universidad y ahí resurge el tema”, explicó.
Remarcó que a la chica le llevó bastante tiempo poder contarlo: “La psicóloga le dijo que era super importante que me lo contara, entonces hicieron una tarea de realizar una carta para poder contarlo, y esa carta me la dejó en mi casa y decido denunciarlo”.