Mujahid informó que la mayor parte de la devastación se produjo en los distritos de Nurgal, Suki, Watapur y Chapa Dara de la provincia de Kunar, con 800 muertos y 2.500 heridos confirmados.

El terremoto, de magnitud 6,0 sacudió el este de Afganistán a las 23:47 hora local del domingo, y su epicentro se reportó a 27 kilómetros con una profundidad de ocho kilómetros, según informó el Servicio Geológico de Estados Unidos. En Kunar, la cifra de fallecidos era inicialmente de 610, con 1.300 personas heridas y numerosas viviendas destruidas.

En Nangarhar, se registraron 12 muertos, 255 heridos y decenas de casas dañadas, según indicó el portavoz del ministerio, Abdul Mateen Qani, quien añadió que equipos de seguridad, médicos, transporte, alimentos y apoyo intensificaron sus esfuerzos para proporcionar ayuda integral e inmediata a los afectados por el desastre. Mientras tanto, en la provincia de Laghman se registraron 58 heridos y en la de Nuristán cuatro heridos.

Las cifras de víctimas son estimaciones iniciales y es probable que aumenten a medida que avancen las evaluaciones, declaró el funcionario.

El terreno accidentado planteó importantes dificultades a los equipos de rescate, pero las unidades de respuesta de los organismos pertinentes se desplegaron en las zonas afectadas para acelerar las operaciones de rescate y la entrega de ayuda a las personas atrapadas o necesitadas, añadió Mujahid.

Brigadas de rescate de los Ministerios de Defensa, Interior y Salud Pública se desplazaron a la zona para evacuar por vía aérea a los heridos hacia el Hospital Regional de Nangarhar, informó el medio local TOLOnews.