El descenso de la temperatura puede afectar a tu mascota más de lo que imaginás. Qué dicen los expertos sobre cuándo un perro necesita abrigo y cómo detectarlo.
¿Todos los perros sienten frío?
Los veterinarios explican que la sensibilidad al frío varía según la raza, edad, tamaño y estado de salud del animal. Perros como el Husky o el Malamute tienen un doble pelaje que actúa como barrera térmica natural, mientras que razas pequeñas o de pelo corto, como los Chihuahua, suelen sufrir más con el frío.
También influye el entorno donde vive la mascota. Un perro que pasa la mayor parte del tiempo en interiores calefaccionados puede sentir más el contraste térmico al salir, aunque tenga buen abrigo natural. Además, los cachorros, los ancianos o aquellos con enfermedades crónicas son más vulnerables.
Señales de que tu perro necesita abrigo
Hay comportamientos que pueden indicar que el perro está sintiendo frío. Prestar atención a estas señales es clave para evitar complicaciones. Según los especialistas, algunas de las más comunes son:
- Temblores o escalofríos
- Caminar encorvado o con rigidez
- Levantar las patas por contacto con superficies frías
- Rechazar salir a pasear
- Buscar constantemente calor o refugios
- Lloriquear o mostrarse ansioso al estar al aire libre
Si detectás una o más de estas actitudes, es momento de considerar el uso de un abrigo.
Consejos para abrigar correctamente a tu mascota
No se trata de vestir al perro por moda, sino de protegerlo de forma adecuada y segura. Para eso, los veterinarios recomiendan:
- Usar prendas que cubran cuello, espalda y abdomen
- Evitar telas pesadas o que limiten el movimiento
- Elegir abrigos impermeables en caso de lluvia o nieve
- No dejarle el abrigo puesto dentro de casa
- Secarlo bien si se moja
- No cortar el pelo durante el invierno
Además, es fundamental consultar al veterinario si el perro tiene enfermedades articulares, cardíacas o de otro tipo. Ellos pueden ayudarte a decidir cuándo usar abrigo y cuál es el más indicado.
Cuidar el abrigo… y la rutina
Además del abrigo, los horarios de paseo también deben ajustarse al clima. Los especialistas sugieren evitar las salidas en las primeras horas del día o al anochecer, cuando la temperatura es más baja. En cambio, el mediodía es ideal para que tu perro disfrute del exterior sin exponerse demasiado al frío.
Observar, conocer y anticiparse a las necesidades de tu mascota en invierno es la mejor manera de garantizar bienestar, salud y una temporada sin sobresaltos
