El azulgrana se consolidó como puntero de la Liga en un vibrante encuentro en el que le ganó 4 a 3 a su clásico rival. Cambiante, el partido regaló todas las emociones. Mbappé hizo tres goles, pero no alcanzó.
Barcelona co menzó perdiendo, pero terminó ganándole 4-3 al Real Madrid en una electizante edición de El Clásico en Montjuic por la fecha 35 de La Liga.
En la previa, era un duelo clave para ambos porque se jugaban mucho. Barcelona venía de quedar eliminado con Inter en semifinales de la Champions League tras haber sido erigido como máximo candidato y debía enmendarlo, mientras que el Merengue, con Ancelotti en la cuerda floja, se jugaba su última chance de soñar con un título esta temporada.
En el inicio, todo fue a pedir del Madrid. Un penal a los s 4 minutos le permitió a Kylian Mbappé abrir el marcador. Apenas diez minutos más tarde, el Merengue recuperó tras un robo y metió un contragolpe sensacional. Vinicus lo puso a correr nuevamente a Mbappé a espaldas de los zagueros y el francés selló el 2-0
Parecía que Barcelona estaba grogui, aunque lejos de eso para un equipo que llegó a estar en esa situación incontables veces en el año. Y así lo confirmó. El equipo rápidamente reaccionó con un gran tiro de esquina peinado en el primer palo que Eric García conectó en el área chica para el descuento.
Más tarde, quien apareció para empatar Lamine Yamal, quien le hizo sentir el golpe a su rival y en la siguiente jugada Barcelona volvió a golpear para la remontada. Un robo en mitad de cancha tras un insólito choque entre Mbappé y Dani Ceballos terminó con una asistencia para Raphina que quedó mano a mano y remató cruzado para el el 3-2.
Sería el propio Raphinha volvería aparecer en el cierre del primer tiempo para el 4-2, cuando la intensidad y los destellos en ofensiva del equipo de Flick sobrepasaban al Merengue. Lucas Vázquez, muy incómodo de zaguero, perdió una pelota en salida en los pies del brasileño, que la abrió para Ferrán y éste se la devolvió al medio para que definiera y marcara el cuarto.
El segundo tiempo mermaría un poco las emociones, por lo menos en la primera parte de esa mitad. Hasta que a los 70′ el Merengue tuvo su chance, en una corrida de Vini que terminó con un pase al medio y que Mbappé finalizó para sellar su hat-trick.
