Sergio Fares fue acusado por rapto agravado por el uso de arma y abuso sexual con acceso carnal. La defensa pidió la prórroga de ocho días.
Este martes, Sergio Alberto Fares fue formalmente acusado por los delitos de rapto y abuso sexual en perjuicio de un adolescente de 15 años. El hecho sucedió este domingo, en el centro de la ciudad de San Luis.
La audiencia se realizó ante la jueza de Garantía, Agustina Dopazo Samper. Intervinieron las fiscales Delia Bringas y Antonella Romagnoli, y el defensor de Menores, Sebastián Privitera. El imputado estuvo representado por Ricardo Gutiérrez Esley.
También participaron los padres de la víctima, que estuvieron acompañados por la abogada querellante Graciela Muñoz. Antes de ingresar, se abrazaron y la mujer se quebró. Lo mismo sucedió al escuchar el relato de lo que vivió su hijo, que el lunes al mediodía recibió el alta médica.
Romagnoli fue la encargada de describir los hechos. Se remontó a la madrugada del domingo, donde Fares en su automóvil Fiat habría interceptado al menor sobre calle Chacabuco, a la salida del boliche Vesania.
«Allí le habría solicitado desde dentro del auto que le indicara dónde quedaba una dirección. El adolescente se habría acercado a la ventanilla del acompañante y en ese momento el imputado lo habría agarrado de su brazo fuerte y le habría dicho ‘subí o te mato’ mientras le mostraba un arma de fuego que tenía escondida bajo la remera», reconstruyó.
De acuerdo a la teoría del Ministerio Público Fiscal, ante el temor, el chico habría accedido y se trasladaron hasta la vivienda de Fares, sobre calle Las Heras. En el lugar lo hizo tomar un vaso de fernet con alguna sustancia. Luego se descompuso, vomitó y perdió el conocimiento.
«Mientras el adolescente se encontraba inconsciente en una de las habitaciones acostado en una cama, el imputado habría abusado carnalmente al adolescente», sostuvo.
Más tarde el menor recobró la conciencia, advirtió lo que estaba sucediendo y «le pidió por favor que parara, a lo que el imputado le habría dicho ‘callate o te mato'».
La víctima pidió ayuda en dos ocasiones a una tía paterna. Primero a las 8:50 y luego a las 10:33. En la última ocasión le compartió la ubicación vía WhatsApp «mientras le manifestaba que llamara a la Policía porque lo querían violar».
La familia del adolescente arribó al lugar e ingresó a la fuerza. Fares estaba desnudo y el menor también en una habitación. «Mami, me violó», le dijo la víctima.
La Fiscalía enumeró las evidencias recolectadas hasta el momento y calificó el hecho como rapto agravado por el uso de arma y abuso sexual con acceso carnal.
En base a los riesgos procesales pidió prisión preventiva por 120 días. Además, requirió como anticipo jurisdiccional la Cámara Gesell al menor, que podría concretarse el jueves.
Privitera y Muñoz adhirieron a los planteos de Romagnoli.
Fares se abstuvo de declarar y su abogado pidió la prórroga de detención de ocho días. Antes cuestionó a la Fiscalía por la falta de pruebas y porque no hubo secuestro de la presunta arma implicada.
