sigue tan dulce como siempre 

Flossie, reconocida por el Guinness World Records como la gata más longeva del mundo, celebró sus 30 años y volvió a conmover con una historia marcada por la resiliencia y el afecto. A pesar del paso del tiempo, su carácter cariñoso sigue intacto, según cuenta su dueña.
La gata vive en Gran Bretaña y, aunque actualmente tiene problemas de visión y es sorda, se desplaza por sí sola, se muestra curiosa y no pierde el entusiasmo a la hora de comer. Su entorno cercano asegura que mantiene hábitos activos y una personalidad tranquila.
A lo largo de su vida, Flossie pasó por distintos hogares tras la pérdida de antiguos dueños, hasta que finalmente encontró un lugar donde recibe cuidado y compañía de forma permanente.
Fuente: Guinness World Records.