Se trata de estupefacientes que fueron secuestrados en diferentes procedimientos que se realizaron en el territorio sanluiseño.
La Unidad Fiscal Federal de San Luis, en conjunto con la Policía Federal y la Municipalidad, quemaron 300 kilos de droga.
En el operativo, que se realizó el viernes pasado, destruyeron estupefacientes que en su mayoría eran cocaína y marihuana y fueron incautados en diferentes procedimientos.
“Se encontraban a cargo de la Unidad en atención al sistema acusatorio implementado en la provincia”, informaron en un comunicado desde la Fiscalía.