Lo dispuso un tribunal. Hace apenas una semana otro juez había ordenado que fuera encarcelado 4 meses.
El tribunal. Estaba compuesto por las juezas María Monserrath Bocca, Cintia Martín y Yanina Vanesa del Viso. Foto: Poder Judicial.
El hombre que hace tan solo una semana fue imputado y enviado a la Penitenciaría de San Luis por cometer tres delitos contra la integridad sexual en perjuicio de una nena no consigue desvincularse de tales acusaciones, pero sí logró bajar considerablemente el tiempo de encierro. Este jueves, un Tribunal de Impugnación de Villa Mercedes resolvió que seguirá tras las rejas, pero ya no por cuatro meses, sino por la mitad de ese tiempo, solo 60 días.
El tribunal compuesto por las juezas María Monserrath Bocca, Cintia Paola Martín y Yanina Vanesa del Viso ordenó que el plazo de la medida de coerción comience ayer a correr.
El abuso sexual sucedió cuando la víctima tenía entre siete y ocho años. El vínculo entre la criatura y el imputado se dio por “un tipo de relación” que la madre de ella tenía con el hombre.
Los otros delitos tuvieron lugar en el último período, entre los 14 y los 16 años de la chica. En los aparatos electrónicos secuestrados al hombre quedó demostrada la existencia de fotos y videos de naturaleza sexual.
No obstante, explicaron que resolvieron mantener la prisión preventiva porque existe “peligro de entorpecimiento de la investigación y riesgo de fuga del imputado” en el caso de que quede en libertad en este estadio del proceso, y también hay “una necesidad de proteger a la víctima”.
El hombre está imputado por “Grooming”, “Producción de material de abuso sexual infantil de niños, niñas y adolescentes (Masnna)”, “Abuso sexual gravemente ultrajante” y “Promoción de corrupción de menores calificada”.
En un primer momento, la fiscal instructora Daniela Torres también había formulado cargos en su contra por “Comercialización del material de abuso sexual infantil”, pero el juez de Garantías Alfredo Cuello consideró que no existieron pruebas suficientes para demostrar que llegó a vender las imágenes de la damnificada.
La investigación empezó el 7 de julio pasado con la denuncia del padre de la chica. La víctima actualmente tiene 16 años, pero de acuerdo a la denuncia y la evidencia recabada, los ultrajes ocurrieron en dos períodos distanciados.
El abuso sexual sucedió cuando la víctima tenía entre siete y ocho años. El vínculo entre la criatura y el imputado se dio por “un tipo de relación” que la madre de ella tenía con el hombre.
Los otros delitos tuvieron lugar en el último período, entre los 14 y los 16 años de la chica. En los aparatos electrónicos secuestrados al hombre quedó demostrada la existencia de fotos y videos de naturaleza sexual.
